Luis Suarez, bocados de realidad.
En el último partido del Liverpool contra el Chelsea, Luis Suarez luchó, literalmente, con unas y dientes por ganar.
En una acalorada jugada, Suarez mordió al jugador del Chelsea Branislav Ivanovic en el brazo.
Esta acción no fue vista por árbitro del partido, por lo que no fue penalizado. Continúo en el juego y terminó marcando el gol del empate en el minuto 97.
Pero esto es fútbol, y lo que ocurre en el campo queda en las cámaras grabado. Las imágenes llegaron a la FA (la Asociación de fútbol) que decidió que el jugador se merece un castigo por conducta violenta.
Suarez tenía hasta las 6 de la tarde de ayer, 23 de Abril, para responder a la acusación y alegar en su defensa. A partir de es momento, una Comisión Reguladora decidirá cual es la pena. Hoy se reune.
Suarez pidió perdón vía Twitter a Ivanovic, pero su arrepentimeinto público no es suficiente para esquivar una sanción oficial.
Esta no es la primera vez que Luis es acusado de morder a contrarios, en 2010 cuando jugaba en el Ajax, vivió una situación similar. El árbitro no le dio mucha importancia al lance del juego, pero recibió castigo por parte de su club y de la liga.
Esta reincidencia puede relevante para la FA a la hora de determinar cual será su sanción.
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