Guardiola, mucho más que un fichaje.

El Bayern no era el único interesado en que Guardiola estuviese en su banquillo. Aparte de directivos y mandatarios del club alemán, había un accionista especialmente interesado en que Guardiola llegase a un acuerdo con el Bayern de Munich.

¿Y quién es ese misterioso accionista? Adidas.

Adidas, además  de tener el 10% de acciones en el Bayern, es una de las  principales marcas que se dispután el mercado de  ropa deportiva a nivel mundial.  Su mayor competidor es la casa Nike.

Y además, Adidas desde hace dos años se encarga de sponsorizar al técnico que esté al frente del Bayern. Por lo que en el fichaje  de Guardiola han primado, también, intereses de los patrocinadores.

Pep Guardiola supone para Adidas, desde hace años, un «oscuro objeto de deseo» a conseguir.  Casi desde que empezó su carrera futbolística, Pep ha sido un chico Nike, primero en los terrenos de juego, y después en los banquillos.

Adidas siempre quiso contar en sus filas con los dos mejores entrenadores del mundo: el portugués José Mourinho, con un importante acuerdo con Adidas, y Josep Guardiola, en manos de Nike. Sin embargo, el ex azulgrana, hasta ahora se le ha resistido.

La decisión del año sabático de Guardiola preocupó a Nike, un año de descanso del mejor entrenador del mundo, podría ser el final de la relación entre el entrenador y la marca, y así fue.

Aún así, a día de hoy, Guardiola en un entrendor libre, en lo que a sponsor se refiere. Así que Adidas tiene casi todas las papeletas para ganarse la vestimenta de Pep. Casi seguro que la firma alemana ya ha tentado al técnico para que comparta con Mourinho armario deportivo.

Aunque Adidas tienen cuatro ases y la partida se está acabando, no infravaloremos a Nike, que ya es un viejo conocido de Guardiola, y podría tener una escalera de color para poner fin al duelo.